Jugo de fresa
Granadina
Limonada
Gaseosa
En la coctelera, o sencillamente en una jarra
echamos el jugo de fresa, la granadina, la limonada y un poco de gaseosa de
fresa y se mezcla todo. Podemos remover además con un poco de hielo y lo
servimos en copas adornadas con rodajas de limón o si lo prefiere, hojas de
menta.
©Dana Lunar
Ingredientes
3 tazas de leche
4 yemas y 2 claras de huevo
Media taza de azúcar (+ 2 cucharadas)
1 tira de cáscara de naranja
1 tira de cáscara de limón
1 vaina de vainilla
1 pizca de nuez moscada
1 pizca de canela
Ron (opcional porque podemos hacerlo con o sin
alcohol).
Preparación
Cogemos un cazo y echamos dos tazas de leche, la
vainilla así como dos cáscaras de limón y naranja y lo cocemos todo a fuego medio.
Dejamos la mezcla en el fuego, y mientras tanto se baten las yemas de huevo con
media taza de azúcar.
Se vierte la leche caliente en los huevos batidos
sin que dejemos de batir en ningún momento. Se coloca de nuevo la mezcla dentro
del cazo y se calienta todo a fuego medio, sin dejar de remover y con el fin de
conseguir una masa que sea espesa.
Retiramos entonces el fuego y echamos la taza de
leche para detener la cocción, y pasamos entonces esa crema a un bol y se deja
enfriar todo a temperatura ambiente.
Se hierve un poco de agua y estando un cazo al
baño maría, se añaden las claras de huevo y dos cucharadas de azúcar,
batiéndolo hasta que veamos que el azúcar ha quedado disuelto y se retira del
fuego.
Se baten las claras (con una batidora eléctrica)
hasta conseguir que lleguen a punto de nieve. Se añade la crema a la
preparación anterior y se sirve en vaso o copa.
©Dana Lunar
Sirve para aromatizar postres, yo lo utilizo en los bizcochos, en los yogures, pero podéis aromatizar cualquier comida que queráis que sepa a naranja.
Ingredientes:
Cáscara de 1/2 kilo de naranjas
Robot de cocina con molinillo con bastante
potencia
Bote hermético para conservar
Preparación:
Pelar las naranjas con un pelador porque solo
necesitaremos la parte naranja lo blanco lo desecharemos porque amarga.
Cogemos un trozo de papel albal y ponemos la
cáscara encima en un lugar seco y con sol, vamos mirando cada día a ver si se
va secando la cáscara.
Pasando de 5 a 7 días este es el resultado ya está
completamente seca, ahora vamos a coger un molinillo de café o un robot con
bastante potencia para moler las cáscaras, lo introducimos el robot y le damos
2 minutos a máxima velocidad, sí vemos que no se está similar al azúcar glass
le damos unos minutos más.
Lo introducimos en un bote hermético para que se
conserve en un lugar fresco y seco.
4 naranjas
1 cucharada de sal kosher, preferiblemente
400 gramos (2 tazas) de azúcar blanca y un poco
más para rebozar
400 gramos de agua
Preparación:
Lavar muy bien las naranjas y cortar los extremos,
hacer cuatro cortes en forma de cruz para sacar fácilmente la piel, guarda las
pulpas en la nevera para consumo posterior.
Corta los trozos de las pieles en tiras del grosor que desees, colocarlas en una olla grande, cubrirlas con agua y agregar la cucharada de sal, calentar a fuego medio-alto hasta que hierva.
Retirar del fuego, colar, colocarlas de nuevo en la olla y agregar agua fría, esta vez sin sal y volver a cocinar hasta que hierva. Repetir este procedimiento dos veces mas (siempre cambiando el agua y no agregar mas sal).Luego del último cambio de agua, colar las
tiritas. En la misma olla colocar el azúcar y agua, agregar las tiritas y cocer
a fuego medio-bajo por 1 hora y media aproximadamente, hasta que las pieles
estén un poco transparentes.
Bajar del fuego y dejarlas en el almíbar hasta que
baje un poco la temperatura, una vez tibias se cuela (reserva el almíbar para
otro uso) y colocar sobre una rejilla. Rebozar en azúcar y secar por al menos
24 horas a temperatura ambiente.
Guardar en un recipiente con tapa en un lugar
fresco.
Notas:
Una vez secas, puedes cubrirlos con chocolate
oscuro fundido. También puedes dejarlas en el mismo almíbar en un bote de
cristal.
Puedes hacer la cantidad de pieles que desees,
sólo ten en cuenta que es igual peso de cáscaras, azúcar y agua.
Si luego de las 24 horas siguen muy húmedas,
rebozar nuevamente en azúcar y volver a secar.
