sábado, 13 de junio de 2020

PAN NAAN




Ingredientes

125cc de agua tibia
1 Cp. de azúcar
1 Cp. de levadura de panadero
125 g de yogur
300g de harina
Sal
2 Cs. de aceite
1 Cs. de mantequilla clarificada
100g de queso rallado o cremoso (variación para el naan con queso)

Cómo se hace Naan y naan con queso
En un vaso mezclamos el agua, el azúcar y la levadura.
Dejamos reposar 10 minutos para que se active la levadura produciendo espuma. En un cuenco vertemos la harina, añadimos el agua con la levadura, el yogur, la sal y el aceite. Mezclamos bien hasta hacer una bola de masa.
La llevamos a una mesa con harina y amasamos 10 minutos.
Dejamos reposar cubierto durante unas dos horas para que suba la masa al doble de su tamaño. Hacemos bolas como del tamaño de una pelota de ping-pong. Con un rodillo y trabajando sobre una superficie ligeramente enharinada, damos forma a las tortillas hasta que queden con un grosor de unos 3 mm.
En una sartén que no se pegue, ponemos un poco de aceite con un pincel (o con papel de cocina) y sobre un fuego fuerte cocinamos los naans hasta que se doren. Les damos la vuelta y volvemos a dorar por zonas. Es normal que con el calor el naan se hinche y el dorado no se podrá producir de forma homogénea dada la irregularidad de su forma.
Retiramos, con un pincel pintamos el naan con ghee (mantequilla clarificada) y servimos calientes. Se puede espolvorear cilantro o añadir algún tipo de especia como comino, para darle más sabor al naan.




Para preparar el naan con queso seguimos exactamente la misma receta pero una vez hemos dado forma a nuestra tortilla, pondremos en su centro un buen puñado de queso. Entonces cerraremos la tortilla sobre sí misma, como si fuera una cestita. Volvemos a pasar entonces el rodillo hasta volver a obtener una tortilla. La idea es que el queso quede atrapado en el centro de la tortilla. Al cocinar el naan se derretirá y dado que este pan debe comerse caliente, al partirse el queso hará hebras. Es delicioso!!


sábado, 6 de junio de 2020

GHEE O MANTEQUILLA CLARIFICADA




Ingredientes
1 a 5 kilos de mantequilla fina sin sal
(según la cantidad de ghi que se desee)
1 cacerola de fondo grueso

Como hacerlo:
Calentando la mantequilla a fuego muy lento, el agua que hay en ella se evaporará y las materias sólidas se separarán, quedando una sustancia perfectamente clara, que es el ghee.
Comience fundiendo la mantequilla a fuego lento. Aproximadamente cada media hora examine el ghee y, con una espumadera, retire las materias sólidas que surjan a la superficie. Si alguna se pegase al fondo, despéguela con una cuchara de madera.
Cuide de que el fuego sea bastante débil para que el ghee no se queme.
Al cabo de unas 2 horas, cuando el ghee se torne de color ambarino y se pueda, como a través de un cristal, ver claramente el fondo de la cacerola, estará listo. Si le parece necesario, puede filtrarlo en un tamiz, para que quede perfecto.
Las materias sólidas extraídas podrán servir en la preparación de panes, bizcochos, hortalizas o cereales. Es conveniente que haga su propio ghee; sin embargo, si no puede hacerlo, adquiéralo en alguno de los sitios donde se compran ingredientes indios.
Si no dispone de ghi, puede substituirlo por mantequilla corriente o aceite de maíz.
Preparación o cocción: 2 a 3 horas.
Mi Ghee
Cuando lo preparo lo hago poniendo una hoja de Laurel y unos granos de sal de mar gruesa, y un diente de ajo cortado.

Para utilizar el ghee recuerde que:
El ghee se solidifica a la temperatura ambiente y se conserva sin refrigeración; está compuesto de 100% de materias grasas, de las cuales se han retirado los sólidos lácticos y el agua.
Cuando quiera dorar, freír o sofreír especias en ghee, debe tenerlas al alcance de la mano, porque correría el riesgo de que el ghee se quemara si tuviese que ir por ellas mientras lo calienta.
Antes de poner el ghee en una vasija, asegúrese de que ésta esté completamente seca. Cuide también de no verter agua sobre el ghee caliente, porque salpicaría violentamente.
En general, nunca se debe mezclar agua con el ghee destinado a freír.
Para una fritura a fondo, el ghi debe estar tan caliente que tueste un trozo de alimento en un minuto. Seguidamente es necesario reducir el fuego. Nunca vierta demasiado alimento a la vez en el ghee caliente, si lo hace, producirá un descenso de la temperatura de éste y la fritura sufrirá.
Si, para freír, se emplea ghee que ya ha sido utilizado, hay que filtrarlo primero y quitarle todos los residuos de la fritura precedente, porque éstos, calcinados, coloran el ghi y se altera el sabor.